El Señor dice: Yo te instruiré, yo te mostraré el camino que debes seguir; yo te daré consejos y velaré por ti. Salmos 32:8
Hoy desafortunadamente el Covid, la pandemia, afectó y paró todo en el mundo, y ha dejado una estela de muerte, crisis y una gran desestabilización y daños.
Y el daño se ha magnificado porque el mundo está conectado de muchas maneras a través de la globalización y por consiguiente nos afecta más en diferentes maneras.
Pero también la crisis mundial que hoy vivimos debiera de ayudarnos y oportunamente aprender a enfrentarla, de ahí que podemos reflexionar en lo siguiente:
- Ser más humildes y enseñables para aprender de otros. Los más rápidos para aprender son los niños. Por eso tenemos que ser como niños.
- Pedir al Espíritu Santo que nos ilumine. Cuando Pedro se dio cuenta que Jesús era divino, Jesús le dijo que no se lo había revelado carne, ni sangre, sino el Padre que está en los cielos. Dios todavía nos ilumina si estamos abiertos a su dirección y señorío.
- Aprender por error. Los líderes gubernamentales aprenden de muchas maneras y debemos decir que muchos se han equivocado en el tratamiento de sus efectos.
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