Alrededor de 300 hundimientos se han convertido en un peligro para peatones, ciclistas y automovilistas, debido a los ‘cráteres’ que se han creados derivado de los deslaves internos y la falta de atención inmediata por parte del Ayuntamiento de Centro.
El primero se encuentra en la avenida Paseo Tabasco, cerca de Prolongación de 27 de Febrero, el cual se originó a finales del mes de mayo, se reparó en una ocasión, pero volvió a crearse por las precipitaciones intensas y la falta de un trabajo eficiente. El orificio tiene una medida de 8 metros de largo por 6 de ancho.
“Ahorita lo que hicieron fue ponerle una cinta color amarilla para prohibir el paso, lo que queremos es que lo reparen. Están dando largas; es un peligro para los que conducimos de noche” expresó Roberto Hernández.
Otro hundimiento se encuentra en la calle Río Mezcalapa de la Colonia Casa Blanca primera sección.
Los habitantes de la zona han introducido palos, a veces le ponen neumáticos, con la finalidad de alertar a los automovilistas, ciclistas y peatones. Tiene una medida de 3 metros de largo por 1 metro de ancho, con un hundimiento de 30 centímetros.
Adrián García, representante del Colectivo Huiziquetla “Pedaleando Andamos”, manifestó que los hundimientos son un peligro para los ciclistas, ya que cuando llueve, los orificios se llenan de agua y llegan a accidentarse.
SON RIESGO HASTA EN BICI
“Un hundimiento nos limita transitar, nos exponemos a ser accidentado por los automovilistas. Afecta la bici y tenemos que subirnos a la banqueta por seguridad”, expresó.
Otro hundimiento se localiza en Avenida Usumancinta, tiene un largo de 1 metro; hay uno más sobre Periférico con 40 centímetros de ancho.
La Prolongación de Cananea de la colonia Indeco, tiene un ancho de 30 centímetros y un metro de largo. En la calle Puxcatán de la colonia Espejo 2, se encuentra otro, con 1 metro de ancho por 1.5 de largo.
Cabe señalar que la cantidad de los 300 hundimientos se mantienen en la capital, toda vez que mientras se reparan algunos, otros vuelven a surgir por fugas internas y precipitaciones.
Hasta me hago la cruz para no sufrir un accidente
José Luis Contrera Morales vive en la zona conocido como “El Triangulo” de la colonia Indeco. Cada vez que sale de su casa y tiene que transitar por la Prolongación de Mártires de Cananea, tiene que hacerlo con cuidado. Hay un hundimiento cercano a la banqueta, por lo que a la hora de transitar por la zona, tiene que hacerlo con preocupación.
“Primero había un hundimiento y lo repararon. Ahora salió otro hundimiento, pero no lo han reparado. Ya se han ido varias camionetas y carros porque así a simple vista no se ve.
Pero cuando ya estás cerca no te da tiempo de pasar, hasta me persigno para no sufir un accidente”, expresó.
A decir de don Hilario de la Fuente, habitante de la colonia Casa Blanca primera sección, comentó que el hundimiento que está pegado al tianguis de la colonia, el desperfecto lleva cuatro meses.
Han tenido que poner neumáticos, cubetas o algún recipiente para alertar a los automovilistas, pero en la noche no se ve.
“Aquí se han ido varios automovilistas. Le pusimos unos palos para que se den cuenta, pero a veces no lo miran. Lo que deben hacer es arreglarlo. Porque si sigue así, lo que va pasar es que se cree un agujero más grande”, expresó el colono.