TUXTLA GUTIÉRREZ, CHIAPAS.- Jovanny pensó que con poner un tapiz de fotos de él besando y abrazando a su pareja en la portada principal de Facebook, se acabarían los pleitos de celos. Nunca pasó por su cabeza que su vida acabaría con un cuchillo ensartado en el pecho, por su propia compañera.
Evely «N» juraba amar a Jovanny, pero no podía controlar sus celos, y cada que surgía una sospecha le reclamaba los supuestos coqueteos, al grado de que ya no le importaba si estaban los amigos presentes o si la leían en los muros de compañero: Ella ejercía un control rayando en lo enfermizo.
Incluso, cuando el joven de 25 años de edad solo hacía bromas con sus amigos, como la vez que compartió con uno de estos la noticia de una mujer que «apuñaló a su esposo porque le daba me gusta a fotos de otras mujeres», no tardaba Evelyn en escribirle como macabra advertencia: «Y a ti también…»
De hecho, en vez de sentirse mortificada, ella alardeaba de ser la «tóxica en la relación que igual no quiere separarse».
ELLA LO ATACÓ
El sábado 3 de octubre, Jovanny y Evelyn están en una fiesta con sus amigos. Ella ha bebido más de la cuenta y comienza a discutir con su joven pareja. Los amigos, que ya la conocen, no le hacen mucho caso, siguen bailando y bebiendo.
Jovanny se aparta con ella y trata de calmarla, pero ella está fuera de sí y discute lo de siempre, por qué se le queda viendo a tal chava, que qué le pasa, que ella no está pintada ni es tonta.
El joven niega las acusaciones y la abraza. Deciden irse a casa. Los amigos los despiden, se apiadan de Jovanny, no entienden cómo puede soportar tanta insidia.
La pareja se traslada al nororiente de la ciudad, a la segunda sección del fraccionamiento Infonavit Grijalva. La discusión ha bajado de intensidad.
Cuando entran al domicilio no hacen ruido, la madre de Jovanny vive en la planta alta y no quieren despertarla.
Mientras se desvisten, Evelyn retoma las acusaciones, no aguanta más, siente que la desconfianza y la rabia la desbordan. Sin que la vea Jovanny, saca de una mochila un cuchillo carnicero, bien afilado, y cuando se voltea lo entierra en el pecho del sorprendido joven.
Jovanny no puede creer lo que sus ojos reconocen aterrado. Pide auxilio a la única persona de la casa que lo puede salvar: su madre. Aunque está en la planta alta, la señora percibe el grito y baja a ver qué sucede.
Al abrir la puerta ve a su hijo con una herida sangrando su pecho, y a su nuera con el cuchillo ensangrentado en una mano.
«Trató de suicidarse…y yo lo ayudé», inventa en ese momento la malévola compañera de Jovanny, aún bajo los efectos del alcohol. La madre llamó al 911 por una ambulancia, mientras taponaba sin apretar demasiado la herida mortal de su hijo.
Al llegar al Hospital general número 2 del Instituto Mexicano del Seguro Social, Jovanny alcanza a susurrarle a su madre angustiada minutos antes de morir: «Ella me atacó».
La Fiscalía General del Estado cumplimentó la orden de aprehensión por homicidio calificado contra de Evelyn «N», quien es sobrina del rector de la Unicach.