CENTRO, TABASCO.- Rosa Elia Osto pensó que la tragedia ya había pasado, al regresar a su casa en la colonia Gaviotas, encontró la destrucción de su vivienda, sus muebles que por décadas le tomó adquirirlo, lo había devastado las inundación de días pasados, el frente de su casa se había convertido en un vertedero de basura.
La avenida Luis Donaldo Colosio ha sido transformada en un basurero a cielo abierto en el que predominan los sillones humedecidos, sillas desvencijadas, comedores despedazados, ropa reducida a despojos y toda una vida de sacrificios arrebatada por las inundaciones donde más de 40 mil familias lo perdieron casi todo.
En esta zona cada 5 minutos un camión de volteo arriba para desechar lo que antes fue el patrimonio de las familias de las colonias Gaviotas Norte y Sur.
UNA GRAN TRISTEZA
El panorama es desolador, las pérdidas son millonarias y proporcionales al daño ocasionado por el desbordamiento del gran río Grijalva.
Al mismo tiempo, decenas de pepenadores han arribado al lugar, buscando entre los montículos de basura algo que pueda ser de utilidad, algún mueble que aún tenga compostura, alguna ropa que todavía aguante una lavada para meterla a bazar.

Doña Carmen Sánchez es madre de cuatro hijos, originaria de la ranchería Jiménez del municipio de Nacajuca, se trasladó hasta la avenida Luis Donaldo Colosio para busca entre la basura algo que le pudiera servir.
‘LO PERDIMOS TODO’
“Perdimos todo, camas, sillones, la estufa, los muebles de mis hijos, nada nos quedó y nos tienen olvidados, por eso tratamos de conseguir algo aquí, la ropa bien lavada con vinagre puede servir”, comentó.
Mientras a un costado de la laguna La Encantada se ha convertido en un basurero, en las calles interiores de la colonia Gaviotas Sur el panorama no es distinto.
Todas y cada una de las calles de la popular colonia dan testimonio del desastre que se ha vivido 13 años después de las terribles inundaciones del 2007, el ciclo se repite, lluvias torrenciales, desfogue de presas, inundaciones, pérdidas materiales, muertes, tragedia, un ciclo que parece no tener fin.